Alas cortadas - Presos en Zimbabue

Johannesburgo, 4 de Septiembre del año 2006

Grandes expectativas.
Se suponía que este iba a ser el viaje de gifting de orgonitas de todos los viajes de gifting de orgonitas, la expedición de todas las expediciones. Desde hace al menos dos años, quería haberlo hecho y los preparativos habían sido meticulosos. Muchos nos habían ayudado a hacer este gran viaje posible, con donaciones y apoyo moral. XL de Australia se había unido a mi para compartir esta experiencia.

El planning del viaje inicial

El arsenal de orgonita para este viaje

Llevábamos 7 cazaquímicos (CBs), 2000 tumbatorres de orgonite (TBs), un montón de Santas Granadas de orgonita (HHGs), muchos tumbatorres acuáticos Delfín, y tubos de tierra de orgonita a bordo. XL se trajo algunos regalos de orgonita para los sitios especiales. Pero iba a ser un viaje muy distinto a lo esperado, esto es lo que pasó:

Zimbabue - un país desmoronándose
El viaje ya empezó con algo de confusión, ya que nos perdimos en la ruta desde Sudáfrica, por la frontera de Zimbabue, por la cual he pasado muchas otras veces. Para las personas que no estén familiarizadas con la situación de las regiones del Sur de África, les daré una pequeña introducción a lo que está pasando en Zimbabue.

Zimbabue ha estado girando hacia la destrucción económica después de que el gobierno de Mugabe empezase a perseguir a los granjeros blancos en sus tierras desde hace unos cuantos años.
Desde entonces, el país ha perdido no sólo la mayor parte de su producción agrícola y sus ganancias por exportaciones sino que ha entrado en un proceso de hiperinflación, el enfoque draconiano-neoestalinista ha incapacitado todos los negocios del país.
Esencialmente, 5 de 17 millones de personas están ahora al límite, trabajando ilegalmente en Sudáfrica. Lo interesante es que, más o menos, la misma proporción es la que Alemania del Este alcanzó después de 40 años de comunismo, únicamente que en Zimbabue les llevó sólo 4 años llegar al mismo resultado.

La actividad económica ordinaria no es posible ahora en Zimbabue, la gente está, por lo general, desesperada, mientras el gobierno persigue a los pobres que intentan conseguir algo de madera en los bosques, metiéndolos en prisión. Mientras, los oficiales de alto rango organizan impunemente cacerías y safaris para los extranjeros ricachones.

Los enfermos son llevados al hospital en camillas de mano, muchos mueren de camino y en las morgues los cuerpos se pudren por falta de refrigeración.

La Unión Europea y la Commonwealth (supongo que los Estados Hundidos también), han impuesto sanciones al país que sólo ayudan más al derrumbamiento.
Se lo ponen fácil a Mugabe cuando culpa de toda la calamidad a Tony Blair, al MI6 o a las que él llama fuerzas neo-colonialistas. Por supuesto que la historia es muy compleja y nada parece ser lo que es.
Mugabe usa una retórica anticolonialista estridente, que aun le da mucho apoyo en todo África.

Pero lo irónico es que él está realmente trabajando para la conquista de su país por parte del Nuevo Orden Mundial.
Es necesario saber que el fue colocado en su puesto por Lord Carrington, el "Kissinger Británico", en las negociaciones de Lancaster House en los años 70s, que llevaron al presente gobierno de Zimbabue, después de que la colonia república renegada de Rhodesia se separase de Inglaterra con su gobierno de minoría blanca, finalmente sobrepasada por una plétora de movimientos de liberación apoyados por los servicios secretos occidentales. Mugabe era sólo parte de uno de ellos, y no el más popular por cierto. Uno de sus primeros actos cuando tomó el mandato, fue una bien difundida masacre de unas 20.000 personas en Matabeleland, que eran leales a su competencia, el líder rebelde Joshua Nkomo. 
En esas negociaciones, se acordó una moratoria de 20 años a la reforma de las tierras, se prometieron grandes sumas de dinero para implementar un pacífico y un legítimo reparto de las tierras mediada por Gran Bretaña pasados esos 20 años, todo esto a razón de la toma de las tierras por Cecil John Rhodes y sus compinches en los años 1880s, que fue una injusticia histórica de proporciones magníficas.

La ayuda prometida nunca llegó, se supone que hay algo de verdad en las afirmaciones públicas de Mugabe, sólo que, triste pero cierto, él trabaja para las mismas fuerzas destructivas a las que elocuentemente ataca en sus odiosos sermones públicos.

Sea como fuere, el país está en el caos y preparado para ser tomado por las corporaciones, después de la eliminación de la clase media, ya sea blanca o negra. Se pretende la eliminación de cualquier grupo económicamente independiente, y la creación de un estado donde sólo haya una pequeña élite funcional que "mantenga las cosas en funcionamiento" y una masa de sirvientes esclavos sin derechos para mantener los niveles de confort de esta élite. La mayoría de "inútiles consumidores" (una frasecica del Nuevo Orden Mundial, no mía) resta para ser eliminada a través de la guerra biológica, como el "SIDA" y los programas de vacunación, las hambrunas, las guerras, la manipulación climática y otras formas de genocidio.

Mire así a Zimbabue: es un laboratorio de pruebas para algunas políticas, igual que Ruanda, Burundi y el Congo. (Olvidé mencionar también Camboya, etc...)

Siento que ese es exactamente el trabajo por el que le pagan a Mugabe.

El jefe de su banco, que posiblemente sea una buena persona, no tiene ni idea tampoco de lo que pasa y está trabajando también para el mismo propósito y enfoque (siempre que no sea parte de la élite).

¡Nunca lo olvide!

Esto ocurrirá una y otra vez si nosotros no hacemos sus planes, creando una atmósfera de auto-organización y prosperidad que crezca en todo el mundo, reemplazando los sistemas económicos corruptos internacionales. La saturación masiva con orgonita aun guarda la promesa de transformar las cosas a su alrededor, aparte de los efectos positivos que tiene en el clima, en la fertilidad de las granjas, dando como resultado abundantes cultivos y deteniendo los intentos de crear hambrunas masivas con la guerra climática.

Como ya puede imaginar, la situación en el país está muy tensa.


Presidente Mugabe de Zimbabwe - ¿La mejor baza del MI6 en el país?

Cuando expongo mi teoría de que Mugabe está realmente haciendo el trabajo del MI6 destruyendo su propio país, siempre obtengo mucha aprobación e información adicional de los sectores despiertos e inteligentes de Zimbabue (que hay muchos). Por ejemplo, acabo de escuchar en conversaciones durante esta turbulenta visita que las "grandes compañías mineras", especialmente LONHRO en Tiny Rowlands, han dejado de ser leales al gobierno minoritario para apoyar los movimientos rebeldes, tal como los servicios secretos occidentales hicieron... Nada es lo que parece en este mundo de cortinas de humo engañosas y espejos...

Formaciones rocosas cerca de Ngundu, hay una base subterránea no lejos de aquí.

Estábamos yendo vía Masvingo, el pueblo cerca de las ruinas de Gran Zimbabue.
La primera noche nos quedamos en un hotel en Ngundu, a unos 100 km antes de llegar a Masvingo.
Como casi todo en Zimbabue, estaba al borde de caerse. 
Sin agua caliente, aunque los precios estaban igual que en los buenos tiempos, y tuvimos que pagar en moneda extranjera.
Había recibido información muy interesante de una fuente anónima, que decía que tenía un operativo en "el ejército único mundial", que ha estado fastidiando África con todas esas guerras sin sentido.  De hecho, no hay guerra en África que no esté motivada por los servicios secretos extranjeros, que crean "movimientos de liberación" para asesinar y crear el caos. Todos esos movimientos insurgentes están equipados y apoyados por este ejército mundial del "Nuevo Odor Mundial".
Este monstruo tiene muchos nombres, llámese Naciones Unidas, French Foreign Legion, South African Mercenaries, CIA, MI6.
Sus actividades se apoyan desde una red de bases subterráneas con capacidad para el armamento climático y el control mental, territorios secretos y prohibidos para entrenar y conformar ejércitos, etc. La mayoría de la insurgencia rebelde se origina en las vastas "reservas de juego" en África, que están bajo control de organizaciones como la WWF (administrada por el Príncipe Carlos de la monarquía británica)
En ninguna parte como en África es el Nuevo Odor Mundial tan evidente y tan asesino en este momento de la historia.
La información que recibí consiste de un mapa con la posición de 100 lugares con algún tipo de base subterránea, algunas de naturaleza militar, otras de naturaleza extraterrestre.
Hemos estado siguiendo esta información en Sudáfrica con muy buenos resultados. Esto significa grandes cambios en la energía atmosférica después de tratar esos lugares.
También hemos encontrado pistas en algunos lugares que indican actividad subterránea.
Quiero decir que no tengo la capacidad de juzgar si esa información es auténtica o no, por lo tanto simplemente tratamos esos lugares, pero la experiencia previa añade mucha plausibilidad a esa información.
La primera de las bases subterráneas está cerca de Runde. El lugar está marcado como un monumento en el mapa. Encontramos una red de carreteras que indicaban actividad en el lugar. Estas carreteras estaban destruidas pero sólo cerca de la carretera principal, un viajero casual no se daría cuenta de lo que pasa allí.
¡Bingo! ¡El mapa acierta otra vez!
Para el trabajo fino de dejar los regalitos en el sitio correcto, necesitamos algo de guía intuitiva, por suerte mi compañero de viaje XL era bastante bueno con eso.
Normalmente ponemos 1 o 2 tubos de tierra de orgonita sobre una base subterránea, además de una Santa Granada de orgonita (HHGs) y algunos tumbatorres de orgonita (TBs) de apoyo.

Lago Kyle cerca de Gran Zimbabue

Regresando al lugar de las famosas ruinas de Gran Zimbabue, que ya habíamos gifteado dos veces, tuvimos una revelación: ¡Se sentía como el paraíso!
Incluso después de la temporada seca invernal, el lugar lucía lustroso y pacífico, con una atmósfera muy positiva.
La última vez que estuve allí con Kelly, también conocido como Laozu, cuando gifteamos un vórtice cerca dejando algunas orgonitas en la zona.
Esta vez gifteamos el lago y otra instalación de antenas en una cima que escapó a nuestra atención las anteriores dos veces.

El complejo de las colinas de Gran Zimbabue

El asiento de una entidad que Kelly notó durante nuestra última visita

XL y nuestro guía Robson que nos guió a mi y a Kelly anteriormente

El gran recinto visto desde la colina

La torre cónica en el gran recinto

Llegando a Harare, capital de Zimbabue, nos registramos en un motel en ruinas, sin embargo nos sacaron 50 dólares. Lo reservamos para el día siguiente, para hacer Harare y alrededores.
Por lo general, la energía alrededor de Harare se sentía mala. Nos paró un policía corrupto que quería un soborno, amenazando con registrar nuestro coche a conciencia, también en numerosos controles de carretera para multarnos por exceso de velocidad. Parece que las nuevas pistolas radar sólo funcionan en Zimbabue...

Nos encargamos de 2 bases subterráneas fuera del pueblo y otra cerca del aeropuerto.
La del aeropuerto era obvia , tenía numerosos respiraderos que se veían en la superficie. Las otras no eran visibles, pero se sentían muy peligrosas energéticamente.
También nos encargamos del centro de la ciudad y los suburbios residenciales.

Por la tarde noche, nos encontramos el lugar de Sheik Yusuf en Chitungwidza. Él lleva un orfanato con una escuela, alimenta y enseña a unos 60 niños que de otra forma vivirían en la calle.

Sheik Yusuf y sus compañeros en Chitungwidza cerca de Harare

Su orfanato recibe un apoyo mínimo del gobierno, todo es muy básico, incluyendo el lugar donde viven. Pero el lugar esta limpio y ordenado, los niños parecen vivir felices allí.


Habitaciones de los niños

El CB en el orfanato

Nubes de lluvia formándose sobre Chitungwidza después de poner el  CB

Dejamos un CB en su patio y observamos cambios inmediatos en el cielo. Como siempre pasa, la sopa química gris empezó a transformarse en nubes tipo cúmulo articuladas, como nubes de lluvia, inmediatamente.

Desde Chitungwidza partimos en dirección a Mozambique, dejando regalos de camino. Por lo general, nos sentimos miserables durante nuestra estancia en Zimbabue, con alguna excepción como por ejemplo durante nuestro encuentro con el modesto Sheik Yusuf. La atmósfera general del país es agresiva y negativa. Uno se siente roto en cada esquina, porque todo el mundo está desesperado intentando sobrevivir. Queríamos irnos rápido de Zimbabue...

Invitados involuntarios de "su excelencia" el camarada presidente Robert Gabriel Mugabe

Justo antes del puesto fronterizo en Nyamapanda, dejamos caer un último TB desde un puente. Habían personas por allí, y XL me advirtió de no hacerlo. Pero nunca antes había encontrado dificultades por que nos vieran lanzando orgonitas e ignoré el aviso.

¡Como me iba a arrepentir de ese momento de estupidez!
No me di cuenta de que estábamos muy cerca de la frontera, ni tampoco de que las personas que por allí habían eran policías de paisano.

¡Maldición!
Al principio fuimos al puesto para que nos sellaran los pasaportes como se hace normalmente.

Pero conforme volvíamos al coche, dispuestos a irnos, los agentes de policía empezaron a hacer preguntas y nos pidieron algunos documentos de los que yo no había oído hablar en mi vida. Me enfadé con los supuestos paisanos, otro fallo. Los tomé por gorrillas pidiendo dinero o "Madobadobas" (esos que se pegan a los turistas para ofrecer ayuda y guía durante la estancia). Lo último que pensé es que fueran agentes de policía.

Entonces nos dijeron que nos habían visto tirar un objeto desde el puente y uno de ellos vino con la orgonita tumbatorres.

Nos dijeron que los siguiéramos al coche hasta una comisaría cercana para hacer una investigación.

No vimos otra forma que contarles todo lo que estábamos haciendo.

El coche fue registrado y se quedaron impresionados de todas las orgonitas que llevábamos a bordo.

Cualquier esperanza de seguir rápidamente se esfumó, nos dijeron que tendríamos que esperar en la comisaría hasta que llegara el comandante oficial.

Durante el incidente, muchos de los agentes nos hablaban de manera amistosa, tuvimos la impresión de que podríamos convencerlos para irnos... Excepto por un oficial, el resto se sentían curiosos y amistosos, más que hostiles. Nos ganamos el apoyo de algunos de ellos, les dimos un montón de panfletos sobre el orgón, unos tumbatorres y Santas Granadas.
¡Pero nada nos anticipaba lo que estaba por llegar!

El comandante llegó tarde por la noche y no quiso ni hablarnos demasiado, nos dijeron que durmiéramos en el suelo de cemento de la oficina, y la radio estuvo crujiendo toda la noche.

Nos permitieron acceder a nuestro coche bajo supervisión de un oficial y tomar algo de comida, aunque nos quitaron las llaves y nuestros pasaportes.

Al día siguiente nos interrogaron, el oficial y el CIO (criminal Intelligence Officer). El segundo resultó ser bastante simpático, su padre había sido un Sangoma (sanador tradicional). Nos habría dejado ir si hubiera sido por él, pero no era decisión suya.

De hecho, uno tras otro, oficiales de más alto rango fueron llegando, preguntando básicamente lo mismo una y otra vez. Obviamente querían ver si nos contradecíamos en nuestra declaración.

Les mostré mis papeles de registro como sanador tradicional del Concilio Internacional de Sanadores de  Malawi, que impresionó al CIO, pero no nos dejaron irnos tampoco.

Básicamente les expliqué que estaba haciendo mi trabajo sanador para llamar a la lluvia, que está protegido por leyes internacionales entre los distintos países del Sur de África acerca del trabajo de los sanadores tradicionales. Entonces decidieron tomar muestras de nuestros artículos para mandarlos a Harare para investigación forense.

Eso nos costará otro día, pensé...
¡Si hubiera sido sólo otro día!

Después de otros dos días más (nos dejaron plantar nuestra tienda de campaña en el suelo policial), con más entrevistas, básicamente contando a todo cristo la historia y haciendo amigos con la mayoría en el proceso, se decidió que seríamos transferidos a otra comisaría para que otros oficiales de más alto rango nos echasen un vistazo.

Me llevaron en mi coche, acompañado por 3 oficiales, usando nuestras últimas gotas de gasoil, mientras XL fue llevado en una furgoneta de policía. Resulta interesante que uno de los oficiales de policía hizo mención de la interferencia externa a su clima, refiriéndose a la guerra climática con HAARP. La cuestión pareció insinuar que nuestras herramientas podrían estar contribuyendo a los esfuerzos por crear esa sequía. El viaje de XL resultó más movidito, porque los oficiales usaban ese vehículo para hacer otros negocios, como el transporte de pollos, cabras, personas y cajas de jabón, para venderlas en otras villas.

Nuestro primer destino fue pasado por alto, la comisaría de Murewa. Tan pronto como llegamos, nuevas ordenes de arriba llegaron y tuvimos que continuar hasta Marondera, la comisaría central de la provincia de Mashonaland este. XL llegó unas 3 horas más tarde, por los negocios de "sus" oficiales de policía.

Llegando a Marondera, nos encontramos con policías de alto rango (juzgando sus vestimentas y su comportamiento) que nos estaban esperando.

Nuestro coche fue totalmente descargado y registrado otra vez.

Otra serie de entrevistas empezaron, aun teníamos el sentimiento de poder salir airosos gracias a nuestro encanto natural y nuestras evidentes buenas intenciones.

Uno de los oficiales novatos que era simpático, me comentó que estábamos ahora hablando con los cargos principales de los servicios secretos de Zimbabue (nadie nos los presentó, por cierto) y que el presidente Mugabe ya estaba implicado en esto.

Una buena confirmación de nuestro trabajo, tener tanto nivel de atención, creo.

Mala suerte que el oficial del servicio secreto a cargo, encontró el mapa con las señales de las bases subterráneas... ¡esto realmente lo puso en alerta! Después buscaron en mi ordenador, pero se decepcionaron mucho al no encontrar nada en él.
Les dije que las marcas en el mapa eran puntos energéticos negativos que había marcado usando un péndulo para averiguarlos.

Pero el señor policía secreta no quedó muy convencido...

El famoso mapa: Bases subterráneas en el Sur y el Este de África.

Al final nos acusaron de un delito menor, de otra forma no habrían podido retenernos más tiempo, ni en Zimbabue. Los cargos fueron "depositar un objeto en un lugar donde no está permitido dejar tal objeto", en otras palabras, por arrojar desperdicios bajo el título de "acto de ofensas variadas". Nos dijeron que debíamos firmar un acta de admisión de culpa, y que estaríamos libres en poco tiempo pagando una multa. Firmamos porque nos pareció un sinsentido denegar los cargos de haber tirado algo desde la ventana.

Ahora no nos permitían dormir en la tienda, sino en las celdas de policía normales.

Detenidos en las celdas de Moronderas

De alguna forma, aun eramos privilegiados porque podíamos tener nuestras ropas puestas (normalmente unos pantalones y una camiseta, sin ropa interior o cinturón) y tomar la comida de nuestro coche.

Nos dejaron usar nuestros sacos de dormir en la celda, después de negociar. Y tuvimos una celda para nosotros solos.

La mayoría de presos no tienen comida, ni agua, casi siempre duermen desnudos en el suelo de cemento. Así deben estar durante varios días hasta que llegan a la vista, en un estado de inhumanidad.

Pude incluso "pasar" mi cámara a la celda de la comisaría en una ocasión y sacar una foto de mi hotel de lujo:

El wc de nuestro hotel de lujo, igual que el del Palmar

Mr. Tata en Maronderas

Durante el día, nos permitían movernos por la comisaría bajo supervisión. Tal y como pasó en Nyamapanda, pronto habíamos establecido una buena relación con los policías normales. Pero a posteriori, siento que algunos de los jefes jugaban a darnos confianza para conseguir nuestra confianza para llevarnos voluntariamente a prisión, donde tendrían todo el tiempo del mundo para pensar que hacer con nosotros finalmente.

Todo podría haber sido posible. Incluso podrían haber puesto explosivos o drogas en nuestro coche, para encerrarnos durante una temporada, o podrían habernos "disparado mientras intentábamos escapar". Las opciones son infinitas y creo que fue el apoyo de la gente a nivel espiritual y etérico que esas posibles situaciones no se materializasen.

¡Y a prisión nos fuimos!

Después de pasar tres noches en la comisaría de Marondera, con la esperanza de que el Lunes se hubiera acabado todo como una pequeña bofetada, todo se puso peor.

El Lunes nos llevaron al juzgado, a ver a la acusación pública. Un delgado y bien vestido señor que no tenía la intención de tratar este caso como un simple vertido de desperdicios sino que insistió en que el informe forense debía verse primero.

Después de pasar por un laberinto de celdas de aislamiento, todas nuestras pertenencias fueron confiscadas al fin. Después de pasar horas en esas celdas heladas, con multitud de prisioneros en espera, nos presentaron en el juzgado donde una magistrada con pinta de perezosa decidió mantenernos retenidos.

Así, nos fuimos a conocer la vida real de las prisiones en Zimbabue.

Primero nos llevaron de vuelta a las frías celdas de retención, mientras esperábamos para que nos llevaran a prisión. Para entonces, ya nos habían avisado de conseguir la ayuda de un abogado.

¿Pero cómo conseguir uno?

Si está acostumbrado a la escena de las películas americanas en las cuales se les deja hacer una llamada con la ayuda de una guía telefónica, eso no pasa en Zimbabue.
De hecho, si no conoces a un abogado, dependes de los guardas, que están ansiosos de ponerle en contacto con uno compichado con ellos, para conseguirse un dinerillo extra. ¿Y qué hay de la lealtad de un abogado tan inmerso en el sistema del juzgado y de las prisiones?

Pero no teníamos opción, así que hablamos con uno de los guardas más agradables que encontramos y le pedimos que nos buscase uno. Pero primero íbamos tener que pasar una noche en prisión...

El medio de transporte era un autobús viejuno que tenía que ser empujado por los guardas para ponerlo en marcha cada vez que había que usarlo para hacer un viaje. Iba lleno a más del doble de su capacidad, yendo espalda con espalda con los otros prisioneros, además de la compra de las verduras de los guardas, sus mujeres e hijos.
Una colorida, incluso divertida situación.

El bus terminó de romperse definitivamente durante nuestra estancia, después tuvimos que embutirnos en la parte trasera de un pickup, con un armazón. Eso fue realmente divertido...

La prisión estaba a unos 15 kilómetros del pueblo, invisible desde cualquier carretera principal, y parecía un campo de concentración con un tipo de perímetro vallado oxidado, aguantando los decadentes edificios.
Las torres de vigilancia y los guardas armados completaban el cuadro.

Aquí nos "despelotaron", pusieron todas nuestras ropas civiles en una bolsa y nos pusieron un par de pantalones cortos caqui y una camiseta parecida, de manga corta (lo siento, no hay fotos de este episodio).

Después nos tiraron en dos celdas separadas en dos bloques adyacentes pero separados.

La siguiente sorpresa:

Antes de entrar a la celda para pasar la noche (ya estaba casi oscuro cuando llegamos), tuve que desnudarme para entrar, allí habían otros 6 adultos esperando. Por suerte, mis miedos iniciales se probaron infundados, pues los compañeros eran tipos muy decentes, la mayoría padres de familia que habían faltado a la ley establecida por desesperación, por obtener comida para sus familias hambrientas.
Algunos llevaban ya 3 años allí, porque no tenían dinero para pagarse un abogado para sacarlos de la celda o celebrar un juicio.

Mantenían la celda limpia y habían desarrollado muchos mecanismos inteligentes para afrontar la vida en prisión.

Una de las diversiones que habían desarrollado era la de jugar al ajedrez. Las fichas estaban hechas de avena seca, acompañadas de judías cocidas. Las fichas negras, igual, pero pigmentadas con ceniza de periódico quemado.
El tablero lo habían hecho con trozos de las biblias que esas iglesias de control mental americanas distribuyen gratis entre los presos.


Este ajedrez lo guardé como suvenir

Al día siguiente, nos llevaron al juzgado otra vez, esta vez con grilletes, ya que de pronto fuimos clasificados como prisioneros de alto riesgo y alta seguridad (los grilletes te acaban cortando la carne después de dar una vuelta por ahí). De estar en esas celdas tan frías, aprendí a mantenerme caliente haciendo ejercicio todo el tiempo (yoga y flexiones con grilletes: uno podría introducir eso en los gimnasios urbanos como novedad de ejercicio para yuppies).

Esta vez si nos reunimos con nuestro abogado. Por cierto, si piensa que las charlas con su abogado son privadas como derecho universal del acusado, no es así en Zimbabue. Para hablar con su abogado tiene que estar en presencia de un guarda de la prisión.
Resultó que ya lo habíamos visto y saludado mientras estábamos en comisaría. Resultó ser un buen tipo, de ayuda, nos prometió mover el caso. También nos dio un tubo de pasta de dientes, jabón y una toalla minúscula, como también zumo para alegrar nuestra dieta en prisión.

El Jueves fue el día consignado para nuestra siguiente visita al juzgado.

También nos contó que el caso se había complicado porque un asunto de "seguridad nacional" estaba sujeto a él.


Famosos por fin: articulo en el Herald del 20 de Julio

El guarda amistoso que nos ayudó a conseguir el abogado nos dijo que ahora eramos famosos, que un artículo había aparecido en el principal periódico de tirada nacional, el que normalmente repite la versión oficial del gobierno, The Herald.
El artículo estaba muy manipulado, falseado en la mayoría de los hechos relatados, por ejemplo, decía que fuimos vistos haciendo nuestro "maligno delito" por algunos pueblerinos, en lugar de decir que eran policías de paisano.

Pasamos otro largo día en prisión, donde jugué unas 10 partidas de ajedrez contra 3 de mis compañeros, perdí algunas y gané otras, todo el rato pensando que sería de nosotros.

XL decidió que haría una huelga de hambre para mostrar que estaba asqueado y cansado de ser amistoso y cooperativo (y porque no le gustaba la comida también). Eso los asustó bastante, le ofrecieron carne, una rareza lujosa en esa prisión, pero por la pinta que tenía, acabó dándosela a sus compañeros.

Luego venían a mi para que lo convenciese de comer. Les dije que era su decisión y que no se preocupasen porque estaríamos pronto fuera de allí (me persuadía a mi mismo con eso).

El jueves nos llevaron con los grilletes al juzgado otra vez, tuvimos una pequeña reunión con el abogado. Nos dijo que lo tenía todo controlado. Horas más tarde aparecimos en el juzgado y el milagro sucedió:

La sentencia fue "en libertad y con una advertencia".


Nuestra acta criminal en Zimbabue: "libertad y advertidos" (después de 9 días)

¡Libertad a la vista! Aun llevo horas, pero en libertad quedamos. Al director de la prisión, que tenía ciertas tendencias sádicas, pareció fastidiarle que nos sacaran de su esfera de poder absoluto. Pero aun tuvo el valor de pedirme que echara un ojo a ver si había algún patrocinador que les financiase otro autobús para la prisión.
Esto me hizo pensar que si quieren matarte, es posible que te pidan que compres tú la bala para ellos primero...

Aun tuvimos una reunión nocturna con el abogado y algunos de sus colegas. Me pareció un tipo agradable, también sus amigos.

Le pedí que echase un ojo a los ficheros de mis compañeros de celda y dejé algo de dinero para cubrir sus gastos. Espero que podamos sacar alguno de allí, sobre todo esos donde el caso está bastante claro y se realice sólo con la ayuda de un abogado y un gasto razonable. Desafortunadamente, nuestro bolsillo estaba flojo, nos robaron unos 1200 dólares del vehículo. Por suerte no se llevaron mucho más.

Partimos directos a Nyamapanda, esta vez de buenas, a aprensión sólo nos abandonó cuando estábamos a salvo en Mozambique.

XL sintió que dejaba el viaje inmediatamente, mientras que yo quise continuar tan lejos como fuese posible. El compromiso fue que llegaríamos por lo menos hasta Malawi, a unos 600 kilómetros de la frontera de Mozambique/Zimbabue, para reunirnos con el Dr. Chipangula del Consejo Internacional de Sanadores Tradicionales del cual soy miembro. Desde ahí decidiríamos que hacer, puede que XL tomase un vuelo a casa, dejándome continuar si podía encontrar un compañero de viaje, o que los dos nos fuéramos a casa en coche.
Su novia se había enterado de nuestra terrible experiencia a través de la embajada de Australia, y estaba bastante preocupada y con miedo.

Mozambique

Cruzar la frontera a Mozambique fue algo fácil y relajado, un alivio después de lo que habíamos pasado.
Nuestro principal objetivo en la corta travesía por Mozambique era Tete, de acuerdo a nuestro famoso mapa, lugar donde hay 2 bases subterráneas peligrosas.
Tete había sido el fortín de RENAMO, el ejército rebelde financiado por occidente, que desestabilizó el "revolucionario" gobierno MPLA durante unos 20 años con ayuda del gobierno del Apartheid y por supuesto con la implicación de todo el  Nuevo Odor Mundial.
La energía en el pueblo y alrededores se sentía asquerosa.

Complejo en la cima de una montaña de Tete (Mozambique)

Una cima en Tete, inaccesible para el poco tiempo que teníamos, fue neutralizada poniendo una cadena de tumbatorres y una Santa Granada. Capturamos los emisores en el pueblo, mientras buscábamos gasolina urgentemente.

Desde este puente de Tete se sentía mala energía

Las bases estaban fuera del pueblo y daban un sentimiento repugnante. Una estaba cerca de una base RENAMO bombardeada, con restos de cemento ennegrecidos por el humo, la otra estaba cerca de una base de las Naciones Unidas, con un montón de chozas blancas con la leyenda "UN" pintada en grandes letras.

Otra base en dirección a la frontera de Malawi hizo su presencia, transmitía un extraño sentimiento de zumbido eléctrico, parecido al que uno siente cerca de una colmena gigante.

Malawi

Llegamos por la noche a Blantyre, el centro económico de Malawi, descubrimos el mejor hotel en el pueblo, realmente apetecible para un buen descanso nocturno después de una comida de lujo.
Por la mañana llamamos al Dr. Chipangula y nos reunimos con su socio el Dr. Kazua y con el hijo de Chipangula, un chico brillante de 14 años.

Nos mostraron el camino a la casa del Dr. Chipangula, una estructura modesta en una de las zonas pobres del pueblo. Al Dr. Chipangula se le conoce y respeta por todo el país y más allá. Es el presidente de una asociación de 250.000 miembros, el Consejo Internacional de Sanadores Tradicionales de Malawi, de la que también soy miembro.

El cielo sobre Blantyre antes de poner el CB

El cielo parecía brumoso y opresivo por la mañana, pero eso iba a cambiar rápido después de poner un CB en la casa del Dr. Chipangula.

No era nuevo a la orgonita, porque algunos sanadores asociados de Johanesburgo le habían llevado algunos tumbatorres (TBs) y Santas Granadas (HHGs), los mismos que me invitaron a hacerme miembro de consejo por nuestro trabajo de sanación medioambiental.

Junto al Dr. Chipangula, estaba el Dr. Chazerezeka y otros sanadores que estaban ansiosos de conocernos, algunos visitantes llegaron y se fueron durante nuestra estancia.

Acordamos dejar casi todo nuestro orgonite en manos del Dr. Chipangula y su organización, para su distribución en Malawi, recientemente golpeada por el Nuevo Orden Mundial con las sequías prefabricadas por HAARP, para crear hambrunas y dependencia de las ayudas, como es usual.
Mi sentimiento es que con la red de sanadores del Concilio, que llega hasta el último rincón de Malawi: con los tres Chembusters (cazaquímicos) y los más de 1000 tumbatorres, además de otros regalos, harían un gran trabajo, mejor del que podríamos hacer nosotros en nuestra visita de tres días. También le dejamos 10 orgón zappers al doctor Dr. Chipangula.

Dr. Chipangula, su hijo, el Dr. Chazerezeka y yo mismo con un rompenubes (CB)


¡Que cambio! El cielo sobre Blantyre después de poner el cazaquímicos  (CB)

¡Este cielo parece vivo ahora!

Esta es la lección de este viaje abortado: ¡No podemos hacerlo todo solos!